miércoles, diciembre 7

Nínfula, segunda parte

La mismísima Dolores Haze (Sue Layton), según el maestro Kubrick.


Pero, a todo esto ¿Qué es una nínfula?
La máxima autoridad en la materia, Vladimir Nabokov, nos dice: "Entre los límites temporales de los nueve y catorce años surgen doncellas que revelan a ciertos viajeros embrujados, dos o más veces mayores que ellas, su verdadera naturaleza, no humana sino de ninfas (o sea demoníaca); propongo llamar nínfulas a estas criaturas escogidas.'' Es decir, una nínfula es una criatura que no por ser pequeña o joven, deja de ejercer una atracción irresistible. Justo como un sol. Un sol pequeño, en este caso.
¿Por qué escribo esto? Quizá sólo para dejar por escrito, una fuerte creencia, con tintes de superstición. La literatura es cabrona.
Justo cuando escribí el blog anterior, cuando en un arrebato de frivolidad pensé que una pequeña estrella, con su propio sistema solar, merecía llamarse Nínfula; ese día me encontré con una feria de libros en la calle. Ahí, di con un ejemplar de Lolita de Vladimir Nabokov, que compré a un precio nada despreciable (¿qué podría ser despreciable en una novela titulada Lolita?). Minutos después, di con otro libro –en este caso nuevo, envuelto en celofán- que me llamó la atención: Cinco mujeres, de Juan García Poce. La literatura es cabrona, al desenvolver el libro y abrirlo me encuentro con que el primer capítulo se titula “Ninfeta”. Ahí no termina mi asombro, la primera línea del texto sentencia: “Santiago no había leído a Nabokov, pero sabía que era una Lolita”. ¿Casualidad? Quizá, no lo se.
Como Santiago, el personaje de García Ponce, yo no he leído Lolita (también como él, sí se lo que es una de estas criaturas, vaya que si lo se) pero en eso estoy, en devorarme el libro, que dicho sea de paso, tras el “prologo”, comienza con un párrafo hermoso y perfectamente escrito:
“Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos desde el borde del paladar al apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo.Li.Ta.”

Como colofón a todo esto, hoy encontré un blog muy interesante –Dural- con un breve ensayo al respecto.
¿Qué mensaje me está dando el destino con estás nínfulas que se me presentan reiteradamente? ¿Acaso me rondan los fantasmas de Vladimir Nabokov o de Stanley Kubrick? ¿O me ronda acaso la presencia perturbadora de una infanta terrible, una femme fatale de tobilleras en las pantorrillas? ¿Me orillará esta mujer, aun desconocida, a cometer locuras, pendejadas y atrocidades (cómo si no fueran suficientes las que hago por mi mismo)?
No se pierdan, queridos amigos, el desenlace de este episodio en la vida de su servidor y amigo. Porque alguna trascendencia deben tener estas señales, lo sé. ¿Por qué? Porque la literatura es cabrona. Por lo pronto, cuando termine de leer la novela, ya les daré mis impresiones.

9 comentarios:

Gabriela dijo...

Pequeñas criaturas con dulces olores a inocencia, de suavidad aterciopelada y miradas tímidas.


Atte.
Maldita Esfinge Pusilánime

Limonada 24 dijo...

Alquien acaba de llamarme nínfula.. y no he sabido como tomarlo.
Al igual que tu, yo ya sabía lo que era una Lolita antes de leer el libro... pero todavía sigo preguntandome si es que esa descripción es para mi... y si lo es ¿que tan bueno o malo puede ser?

Y concuerdo contigo... que literatura más cabrona!!

Rogelio Flores dijo...

Mi querida Limonada

Lo de nínfula deberás tomarlo dependiendo de quien te lo haya dicho, creo.
En mi caso una Lolita es un amujer increíble que se adelantó un poco, pero como ya soy un treintañero que pinta canas, me alejo de ellas antes de despertar la ira de la sociedad.

La literatura debe ser cabrona siempre, no?

Anónimo dijo...

Yo estoy a punto de dejar de ser una Lolita. Al principio me parecia muy divertido. Pero ahora en verdad hago referencia a una parte del libro: muchos te destrozan el corazon, pero el primero ha destrozado tu vida. mi historia nunca fue algo fuerte. Era de hecho frustrante, podia tener al hombre que quisiera con una mirada, y niños de mi salon ni me volteaban a ver. Claro, tenian once aaños. Pero el punto es que cuiden a sus niñas. A mi me dicen Lolita de cariño en mi casa, y vaya que lo dicen en broma, porque pues asi me decia mi madre porque era muy prcoz. Tal vez me haya parecido divertido con el tiempo, pero cuando una esta pequeña y no sabe lo que pasa, hay demasiadas voces diciendo : diselo a alguien de confianza ; señores : no es cierto. Cuando eres tu la persona a la que le quitan de ese modo la inocencia, arruinan esa parte de ti. En ese momento acaban contigo ...

srta_pinup dijo...

exelente lo que escribiste
me encanto
saludos =)
eres mi blog preferido
jejeje

Baal dijo...

Con 7 meses después del último post no pude evitar exteriorizarlo. Nabokov es un genio, un genio sin prescedentes, un dios, ídolo de millones, y Lolita es su Lilith. Y quién más adecuado para representar la Opus Magna de San Nabokov que el mismísimo Stanley Kubrik.

Anónimo dijo...

Anonimo... teneis toda la razon... yo he vivido con eso muchos años... y siempre quedaran secuelas... no es tan divertido como al principio parece... esa cruz se cargara toda la vida... anhelaremos siempre el haber tenido nuestra inocencia mas tiempo... y no ser arrebatada de esa forma...

Anónimo dijo...

cuando yo tenia 11 años vi esta pelicula y me senti identificada. una no se da cuenta de lo que sucede y termina sintiendose culpable y sucia, le atraia a los hombres mayores y yo podia hacer lo quisiera con ellos y no existia para los de mi edad.........siempre fue asi......ubo muchos momentos dolorosos por que le atraia incluso a hombres que no debieron y me hicieron mucho, mucho daño.....ahora yo tengo 23 años y me case con un hombre de 50, 26 años mayor que yo, tenemos un hermoso hijo de 2 años, mi historia termino bien, pero hay muchas que no.......................ser una ninfula es un privilegio maldito

Anónimo dijo...

yo soy una ninfula, tengo historias muy largas de mis exeriencias,para mi es divertido seducir a un hombre aun cuando este no me agrade, soy la que hace que mas de un adulto se revuelque con mi sola presencia, los jovenes no me atraen, pero yo si a ellos, me sirven como una especie de mascara para disimular lo que enrealidad soy, he dejado muchos hombres a mi paso, no se en que estado habran quedado , no es mi problema, pero en etos momentos ando con uno 22 años mayor que yo, y otro 20 años mayor que yo que solo uso para mi conveniencia y pues unos mas pero no son importantes, lo que mas me gusta es manejarlos y ver como caen en mi juego, ver como disfrutan estando conmigo y la incertidumbre de "¿quien habra sido antes que yo?", soy una ninfula, lo descubri cuando lei la novela y me senti muy identificada con el personaje de lolita, mi historia es larga, y fuerte, y lo que vivo lo vivo por gusto, no me arrepiento.

LAMAT